Con un buen desayuno en el cuerpo, nos dividen en grupos y nos llevan al “Liceul Teoretic Novaci”, donde nos han presentado a todos de forma oficial y hay intercambios de regalos por ambas partes. Ha sido un momento bastante especial, y a continuación, cómo no estando en un instituto, nos dividen y nos llevan a distintas aulas del centro. Nuestros chicos han tenido clase de historia y lengua rumana con alumnos locales, y a los profesores nos han llevado con compañeros que impartían nuestra materia en el centro. Ignacio ha participado en una clase de religión ortodoxa con un sacerdote y un profesor croata de su misma materia. A Mercedes le ha tocado entrar a clase de francés, donde han estado jugando al tradicional juego tres en raya para repasar los tiempos verbales. Ha sido una gran experiencia, tanto para nosotros, como para los alumnos, el poder compartir este agradable rato con los europeos en un aula.
Hoy el recreo ha sido más largo y divertido de lo habitual, y es que nos han llevado al “Adventure Park” de la zona. Allí los alumnos y algunos profesores han participado en actividades multiaventura. Han pasado un par de horas muy divertidas practicando tirolina y caminando sobre cuerdas o pasarelas de obstáculos algo complicadillas que estaban suspendidas entre los árboles. ¿Qué decir del paisaje de la zona? Los Cárpatos son increíbles, pero si ya les añades el encanto otoñal con la niebla, el color anaranjado y marrón... uno se siente envuelto por ellos y te hace recordar alguna que otra historia en libros de vampiros.
La tarde aún prometería mucho, pues aparte de llevarnos al ayuntamiento de Novaci, donde nos han explicado la historia del edificio, hemos podido acudir a la casa de cultura para ver un espectáculo de baile con trajes tradicionales que nos ha dejado boquiabiertos. Como buenos anfitriones, luego nos han invitado a bailar con ellos, aunque ha sido algo difícil para algunos seguir el ritmo de estos alumnos tan profesionales. Ha sido un rato bastante gracioso en el que nos hemos reído bastante. También ha sido muy especial sentir esa unión europea tan necesaria hoy en día…, bailando todos juntos de la mano en un círculo.
Hemos terminado el día con otra buena cena en la pensión. Hoy ha tocado barbacoa y otro postre riquísimo con chocolate y frutos del bosque que nos ha dejado bastante satisfechos. Tras una velada de charlas después de cenar, nos vamos a dormir que mañana amanece pronto de nuevo.
