12/4/17

Taranto. A modo de punto final...

Cómo no hablar sobre la fiesta de despedida que ofrecen los anfitriones. En este caso se acompañan algunas imágenes. La honda seducción que entrañan las danzas de Taranto, que en algún punto podrían recordar a algún palo flamenco (tarantelas?), igualmente sentido. El danzante lo hace descalzo, matiz que hace pensar en la arena de playa como lugar de realización. Las danzas populares duraron casi lo que el cuerpo aguantó.






Nuestros anfitriones italianos prepararon una tarta Erasmus 70 Years of European History para endulzar una despedida que se intuía ya próxima en el ánimo, en el ambiente...


La última mañana tuvo más de trámite burocrático-administrativo, para dejar bien atados todos los cabos de la movilidad en Taranto, aunque se organizó una última exposición-documental en el Instituto Plateja, nuestro anfitrión, sobre Aldo Moro, interesantísimo.





Y levantamos el ancla en el Proyecto 70 Years of European History. Punto final para una inmejorable experiencia de conocimiento, de reflexión y de aprendizaje para profesores y alumnos europeos, mirando siempre al horizonte pero con los ojos puestos en el futuro. Un futuro que se llama Unión Europea, soplen los vientos que soplen.



Taranto, 10 de abril de 2017

Y después de una dura semana de reuniones, actividades y visitas guiadas nuestros aguerridos expedicionarios del Clara Campoamor de La Solana siguen conociendo en profundidad el pasado y el presente de esta bella y llena de contrastes ciudad de Taranto. Aquí nos envían un buen reportaje gráfico de sus andanzas. Ya con un ojo puesto en la vuelta, pero felices y anticipando la nostalgia por tantos momentos, experiencias y contactos vividos en esta semana europea.
Nos veremos en el siguiente erasmus.





























Taranto, 9 de abril de 2017

Martina - Alberobello
Esta mañana hemos paseado por las calles de Martina, una de las ciudades de la provincia de Taranto. El casco histórico parece un laberinto: avanzábamos por unas calles que de repente no tenían salida, volvíamos atrás a tomar otra dirección en la encrucijada, volvíamos a quedarnos sin salida... Todo en un silencio roto por la mnúsica de alguna vivienda donde alguien haría sus tareas al son de las canciones italianas y de vez en cuando por las campanas ensordecedoras que nos recordaban que hoy es Domingo de Ramos.
Hemos podido comprobar la religiosidad del lugar al cruzarnos con dos procesiones en las que los feligreses portaban ramos de olivos en sus manos. Una de ellas ha acabado en la catedral de Martina, que alberga las reliquias De los Santos de la ciudad.






Por la tarde, tras la comida en un restaurante, hemos podido visitar Alberobello, patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Las construcciones del casco antiguo son muy curiosas: se trata de pequeñas viviendas, aún hoy muchas de ellas habitadas, con forma cónica. Las paredes son blancas, los tejados en forma de cono que termina con un símbolo propio para cada casa y hechos de piedra oscura. Dentro hay lugar para un pozo, una cocina y distintas estancias para los miembros de la familia. Hemos disfrutado de un magnífico paseo bajo el sol de la tarde, entre tiendas de souvenirs y con una excepcional compañía.







Un día más que se termina, lo que es también un día menos de este Erasmus en Italia. Mañana conoceremos un poco más la ciudad de Taranto. Ahora toca descansar.