18 de diciembre
Anoche, a propuesta de Mario, uno de los portugueses, los profesores compramos comida y la compartimos para cenar. Preparamos cada equipo lo que pudimos para llevar algo típico o parecido de nuestro país. La velada fue muy agradable y reímos mucho. Procuramos no acostarnos muy tarde porque a la mañana siguiente nos recogerían más temprano que de costumbre.
Por la mañana temprano, nos juntamos en la puerta del hotel con las maletas listas para dirigirnos a Bucarest. El viaje de casi dos horas fue aprovechado por muchos para dormir. En Bucarest visitamos el Palacio, el segundo edificio más grande del mundo, después del pentágono. Fue mandado construir por el dictador Nicolás Ceauceascu, pero nunca lo utilizó, puesto que la revolución de 1989 puso fin a su régimen y a su vida. El Palacio fue terminado unos años después. En su construcción participaron muchísimos artesanos y ciudadanos y por ello es considerado el Palacio del pueblo. Actualmente es utilizado para recepciones y actos oficiales. Pudiéndose decir que sólo una persona utilizó la balconada del edificio para dirigirse a laenorme multitud que puede entrar en la plaza enfrente del palacio, Michael Jackson. Tras la visita nos dirigimos a comer a Caru cu Bere, el restaurante más antiguo de Bucarest, y aunque la comida nos ha resultado algo escasa, su visita bien merece la pena. Tras la comida ya nos dirigimos al hotel en Otopeni para dejar las maletas y volver a Bucarest para pasar la tarde paseando y comprando recuerdos.
Anoche, a propuesta de Mario, uno de los portugueses, los profesores compramos comida y la compartimos para cenar. Preparamos cada equipo lo que pudimos para llevar algo típico o parecido de nuestro país. La velada fue muy agradable y reímos mucho. Procuramos no acostarnos muy tarde porque a la mañana siguiente nos recogerían más temprano que de costumbre.
Por la mañana temprano, nos juntamos en la puerta del hotel con las maletas listas para dirigirnos a Bucarest. El viaje de casi dos horas fue aprovechado por muchos para dormir. En Bucarest visitamos el Palacio, el segundo edificio más grande del mundo, después del pentágono. Fue mandado construir por el dictador Nicolás Ceauceascu, pero nunca lo utilizó, puesto que la revolución de 1989 puso fin a su régimen y a su vida. El Palacio fue terminado unos años después. En su construcción participaron muchísimos artesanos y ciudadanos y por ello es considerado el Palacio del pueblo. Actualmente es utilizado para recepciones y actos oficiales. Pudiéndose decir que sólo una persona utilizó la balconada del edificio para dirigirse a laenorme multitud que puede entrar en la plaza enfrente del palacio, Michael Jackson. Tras la visita nos dirigimos a comer a Caru cu Bere, el restaurante más antiguo de Bucarest, y aunque la comida nos ha resultado algo escasa, su visita bien merece la pena. Tras la comida ya nos dirigimos al hotel en Otopeni para dejar las maletas y volver a Bucarest para pasar la tarde paseando y comprando recuerdos.
Cena compartida en el hotel Corso de Buzau.
Lo pasamos muy bien.
Muy temprano salimos hacia Bucarest.
...trolebuses...
...y taxis son parte del tráfico intenso.
Las casa pobres rivalizan con los centros comerciales más modernos.
El segundo edificio más grande del mundo.
Personajes importantes de la historia rumana.
Todo es grande aquí.
Todo es lujo.
Ideado como palacio para un dictador que no llegó a verlo terminado.
El único que reinó desde este balcón fue Michael Jackson y fue por unas horas.
Caru cu Bere, el restaurante más antiguo de Bucarest.
Muy antiguo y pintoresco.
Muy acogedor.
Héroes de la patria, pero los de la estatua de atrás.
Entrada del centro comercial.
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