Nuevamente nuestro instituto
consiguió ver aprobado un proyecto europeo. En esta ocasión se trató del
proyecto Erasmus K1 titulado Formación
del profesorado para la conversión de nuestra institución en centro de
especialización curricular en plurilingüismo y movilidad transnacional.
Este proyecto se sustenta en la
participación de seis profesores del centro en cursos ofrecidos por diferentes
instituciones académicas en países europeos, concretamente en Francia, Malta e
Irlanda. El plazo de ejecución estuvo
comprendido entre el 1 de julio de 2015 y el 31 de mayo de 2016.
|
Campanile
del Trinity College, un espectacular conjunto de edificios de varios estilos
arquitectónicos, sede de la más prestigiosa y antigua universidad irlandesa. La
entidad organizadora alquiló allí aulas para el curso |
Concretamente
el curso que yo hice se titulaba CLIL in
Dublin: Content and Language Integrated Learning. Se celebró en las
instalaciones de una prestigiosa y secular universidad: el Trinity College de
Dublín, en pleno corazón de la capital irlandesa, desde el 22 al 28 de mayo de
2016.
Los objetivos del curso eran
.- Crear el mayor número posible
de situaciones comunicativas para mejorar la comunicación oral en inglés
.- Mejorar las habilidades
lingüísticas para el trabajo en el aula a través de metodología CLIL (acrónimo
en inglés de Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lenguas Extranjeras)
.- Explorar el potencial de
proyectos de trabajo basados en la investigación a través de ideas prácticas
para el desarrollo de las clases
.- Intercambiar ideas y
materiales educativos con profesores de escuelas de otros países europeos.
.- Conocer aplicaciones
informáticas que pudieran ser usadas en el aula
Se pretendía usar la historia,
cultura, arte, paisajes… de Dublín e Irlanda en general como contenidos para
desarrollar todas esas ideas y proyectos, lo que en el curso se llamaba
“Context for Contents”
|
Emmett
Theatre, en el Trinity, lugar donde se desarrollaron algunas de las sesiones |
Todos estos objetivos se
desarrollaron a lo largo de toda una semana (incluyendo el sábado y el domingo)
de sesiones de trabajo de mañana y tarde más visitas a museos y monumentos
tanto en Dublín como en otros lugares de Irlanda, concretamente la ciudad de
Kilkenny y el asentamiento monástico de Glendalough.
Las personas que impartieron los
cursos fueron competentes y comprometidas en su labor, así como el director de
proyecto, un emprendedor español, profesor de la universidad de Jaén con
grandes dotes de liderazgo y motivación.
Los cuarenta inscritos en el curso se dividieron en
dos grupos de 20. Había profesores turcos, alemanes, italianos, portugueses,
españoles, eslovacos, suecos, croatas, holandeses, húngaros, franceses y
belgas.
|
Aula
en el edificio Aras an Phiarsaigh, en el Trinity College |
Debo decir con satisfacción que
el nivel medio de los profesores españoles, tanto su dominio del inglés como su
capacidad e iniciativa, era bastante satisfactorio.
He usado el gentilicio masculino
como convención gramatical pero he de decir que la mayoría de los participantes
eran mujeres.
Se nos proporcionó a los alumnos materiales de gran
utilidad que puede ser consultado aquí por los interesados en la metodología
CLIL y en las ITC orientadas a la enseñanza: enlace a los materiales.
Como conclusión general debo
decir que el curso fue una actividad intensa e incluso algo agotadora, pues
teníamos muchas horas de clase diarias y además debíamos hacer trabajos en los
que aplicábamos los contenidos trabajados en las clases teórico-prácticas.
Observé que tanto profesores como
alumnos nos tomábamos en serio la actividad y se notaba que el nivel de compromiso
general y participación activa en el curso era grande.
Además de desarrollar nuestras
competencias profesionales surgió un ambiente muy amigable entre profesores y
alumnos y todos nos tratábamos con respeto y camaradería.
La organización nos proporcionó un listado de
participantes con su dirección, nacionalidad y correo electrónico con lo que
cada uno de nosotros disponemos de una base de datos para posibles proyectos
transnacionales entre institutos europeos.
Hasta
aquí la parte académica del curso Erasmus desarrollado en Dublín.
En cuanto al viaje en sí hay que
señalar que aunque mi hotel era de tres estrellas al final resultó ser un hotel
asaz cutre y deprimente, lo único bueno era su excelente ubicación en el centro
más céntrico de Dublín.
Afortunadamente tener a mano una
ciudad hermosa y estimulante me hizo olvidar mi triste alojamiento.
Dublín es una ciudad limpia,
próspera, dinámica, cosmopolita y con un aire muy “British” incluyendo sus
autobuses de dos pisos.
Su clima es maravilloso para una
persona como yo que valora el tiempo fresco e incluso frío. Es una ciudad menos
lluviosa de los que normalmente se supone.
Dublín tiene unos museos y
jardines muy interesantes. Ese clima fresco y húmedo permite la construcción de
unos jardines maravillosos con una vegetación exuberante y al mismo tiempo
serena y con unos campos de césped con un vibrante color y perfectamente
recortado.
|
Saint
Stephen Garden |
Desgraciadamente el horario tan
extenso de los cursos me impidió visitar algunos museos que cerraban de 5 a 6
de la tarde; aun así tuvimos oportunidad de visitar muchos lugares interesantes,
bien dentro del grupo de asistentes al curso, o bien a título individual.
a.- Entre las iglesias destacaría
la Catedral de San Patricio, dedicada al evangelizador de Irlanda y la
Santísima Trinidad de Dublín o Christ Church Cathedral. Ambas con un depurado
estilo gótico muy presente en Dublín y caracterizado por sus sillares de color
gris oscuro.
|
Rebelde
irlandés capturado por soldados británicos |
En el museo
municipal Hugh Lane Gallery se
muestran cuadros y otros documentos sobre Roger Casement y el posterior juicio
al que fue sometido tras los sucesos de 1916. Quien haya leído “El Sueño del
Celta” de Mario Vargas Llosa recordará este singular y activo personaje
histórico irlandés.
|
Detalle
del cuadro “El Juicio a Roger Casement” este líder independentista irlandés fue
ejecutado por colaborar con los alemanes en la Primera Guerra Mundial para
obtener ayuda para la independencia de Irlanda |
d.- En
el museo arqueológico nacional pudimos contemplar restos de los distintos
periodos históricos de la isla. Lo que más me llamó la atención fueron los
restos vikingos, la mitificada batalla de Brian Boru, presentado como el primer
luchador por la independencia irlandesa, y los misteriosos restos humanos
momificados en condiciones anaeróbicas que de vez en cuando se hallan en las
turberas inundadas de Irlanda y otros países del centro y norte de Europa.
|
Tumba
de guerrero vikingo con su espada, en el Museo Arqueológico Nacional. Las
primeras incursiones vikingas en Irlanda datan de 795 |
e.-
Irlanda fue un país evangelizado por el misionero inglés San Patricio en el
siglo V. En Irlanda se conservan restos antiquísimos de asentamientos
monásticos. En este viaje visitamos el complejo monástico de Glendalough,
enclavado en un paisaje hermosísimo con el característico verdor de Irlanda. En
ese paisaje de bosques, prados, montañas, ríos y lagos glaciares se alzan los
restos de iglesias y monasterios en un estilo demasiado tosco como para
llamarlo románico, pero aun así bello en su simpleza y arcaísmo.
|
Iglesia del asentamiento
monástico de Glendalough
|
Otro
resto más elaborado de este pasado misional de Irlanda es el espectacular y bello
códice denominado Book of Kells, que entre otros textos incluye los cuatro
evangelios, excepcionalmente bien conservado y considerado uno de los mayores
tesoros artísticos e históricos de Irlanda.
|
Pliego
de pergamino del Book of Kells preciosamente miniado |
Quien ama la literatura podrá
hallar en Dublín la huella de grandes escritores irlandeses como Oscar Wilde,
James Joyce, Gilbert Keith Chesterton y Seamus Heaney, incluso se pueden
encontrar las ilusorias huellas de Leopold Bloom, el célebre anti-héroe de la
novela Ulises de James Joyce.
|
Estatua
de James Joyce |
|
Estatua
de Oscar Wilde |
|
Lugar
donde Leopold Bloom almorzó en su “épica” jornada en el “Ulises” de James Joyce |
|
Molly
Malone, personaje ficticio que aparece en una canción popular que es el himno
no oficial de Dublín, Molly es pescadera de día y prostituta de noche,
representa las clases más humildes del Dublín tradicional |
Aunque las visitas y excursiones
realizadas se centraron más en aspectos históricos y artísticos intenté sacar
también algún conocimiento científico. Intenté visitar el Museo de Ciencias
Naturales, pero cerraba mezquinamente a las 5 de la tarde, cuando aún quedaban
casi seis horas para la puesta del sol. Tampoco pude visitar por motivos de
horario una exposición de zoología en la facultad correspondiente del Trinity
College. Sí alcancé a visitar la Science
Gallery del Trinity donde unas simpáticas estudiantes que ejercían de
monitoras me explicaron en un inglés incomprensible los últimos avances en
cibernética e ingeniería genética aplicada a la agricultura y ganadería. A
pesar de mi ignorancia no me privé de darles mi opinión al respecto.
En nuestro viaje a Kilkenny y Glendalough pude ver
espléndidos bosques atlánticos con hayas, robles, olmos, abetos, helechos,
musgos, etc. y dos lagos de origen glaciar encajados en valles con el
característico corte en forma de U.
|
Bosque
de tipo atlántico |
|
Lago
de origen glaciar en Glendalough |
En
cuanto a la geografía humana y económica, resultó muy interesante atravesar la
campiña, donde pude ver los jugosos campos de cebada que alimentan la mayor multinacional
irlandesa, fundada en el siglo XVIII por Sir Arthur Guinnes y consagrada a la
benemérita tarea de fabricar la cerveza homónima; cultivos de colza, y, sobre
todo, la numerosa ganadería ovina y bovina que pasta feliz en las ubérrimas
praderas. No me extraña que con la liberalización del sector lácteo de la UE la
producción y venta de productos lácteos irlandeses esté conociendo un auténtico
boom.
|
Antiguas
instalaciones de Guinness en Saint James Gate. Guinness Brewery ha sido durante
siglos la mayor empresa irlandesa y la mayor empleadora del país. Tras estas
puertas se halla el “Guinness Store House”, un gran y moderno museo interactivo
dedicado a esta centenaria empresa y a su producto típico: la cerveza negra |
JUAN ALFONSO MAESO BUENASMAÑANAS