En el último día de nuestra aventura italiana hacemos balance de estas jornadas tan bien aprovechadas de principio a fin.
Desde el punto de vista académico, hemos conocido un centro con alumnos de entre 14 y 18 años muy motivados en clase, con un nivel de inglés muy alto y con muchos planes de futuro entre los que destacan ir a la universidad en el norte del país, al ser esta la zona más rica y con más posibilidades de encontrar un trabajo mejor e incluso seguir estudiando en el extranjero en lugares tan diferentes como los Estados Unidos o España.
Desde el punto de vista humano, hemos coincidido y charlado con personas de diferentes países como Polonia o Francia , además de los propios italianos, que conocen o están deseosos de conocer nuestro país y que lo valoran sobre todo por sus ciudades más turísticas y también por sus gentes. También hemos compartido alguna charla con profesoras de Leganés y Valencia que estaban haciendo en Salerno lo mismo que nosotras.
Y desde el punto de vista turístico, hemos disfrutado de una ciudad costera muy cómoda y estratégicamente situada para poder visitar la bulliciosa ciudad de Nápoles, así como las maravillosas ciudades de Pompeya y Paestum.
Ya en casa, solo podemos definir esta experiencia como enriquecedora e inolvidable.