Nuestro viaje ha llegado a su fin. Hoy nos despedimos de Florencia con una de las visitas más emblemáticas de la capital de la Toscana: la Galería de los Uffizi. Puede que este palacio y museo no sea familiar para todo el mundo pero si decimos que cada año recibe unas dos millones de visitas y que alberga obras de la talla de “El nacimiento de Venus” o “La primavera” de Boticcelli, “El bautismo de San Juan Bautista” de Verrochio o “La Venus” de Tiziano podemos hacernos a la idea de su importancia. De hecho, la Galería de los Uffizi es a Florencia lo que el Museo del Prado es para Madrid. Durante años, parte del museo fue utilizado para almacenar las piezas de arte de la magnífica colección de los Uffizi. También presenta una colección de estatuas romanas, relieves y sarcófagos muy interesante.
Tras pasar toda la mañana recorriendo las numerosas salas del Museo, hemos hecho un descanso para comernos la última “foccaccia” del viaje. Sus ingredientes han sido “prosciutto” o, lo que es lo mismo, su jamón serrano, tomate natural y burrata. Y de postre nos hemos tomado un delicioso helado de pistacho y avellana de la conocidísima Heladería Venchi, una de las más famosas de la ciudad.
Para finalizar hemos visitado la Basílica de Santa Felicitá, en el barrio de oltrarno, al lado del”Ponte Vecchio”. Destaca la magnífica Capilla Barbadori (actualmente Capponi) de Brunelleschi decorada con obras del pintor manierista Pontormo. Destaca “El descendimiento”.
Y esto ha sido todo. Mi resumen es que ha sido un curso y un viaje inolvidable. Y es que Erasmus+ hace honor a su lema: “Changing lives, opening minds”