Hoy se desarrollaron las últimas actividades del programa. Nos reunimos de nuevo en el instituto para calcular la huella de carbono que el IES Clara Campoamor había producido en 2022, año natural. Cuando ya los teníamos tras haber respondido a las preguntas de una encuesta de Greenpeace, comparamos los resultados con los del instituto de los estonios que habíamos calculado el pasado octubre, cuando nosotros les visitamos. Claramente, al ser un edificio más grande el de ellos, producían una cantidad mayor de huella de carbono, pero nuestras cifras tampoco eran bajas debido a la enorme cantidad de viajes y excursiones que se hicieron. La conclusión a la que llegamos todos, es que queremos seguir viajando, pero podemos mejorar en elegir transportes más ecológicos o cambiando algunas de nuestras acciones diarias para proteger nuestro medio ambiente.
La última tarea fue calcular nuestra huella de carbono individual, respondiendo a una encuesta también e introduciendo unas bolitas de colores en un recipiente dependiendo de nuestras rutinas y sus consecuencias en la naturaleza. Terminamos con una reflexión, donde todos opinamos que debíamos mejorar en alguna de nuestras costumbres para reducir nuestra huella de carbono.
Éste fue el final del proyecto Erasmus con Estonia. Es muy gratificante poder compartir estas experiencias tan enriquecedoras con otros países de nuestro continente, que tanto nos aportan y que no quedarán en el olvido. Al día siguiente, nuestros amigos estonios partieron hacia Madrid, no sin antes darnos un abrazo cuando iban a subir en el autobús. Ojalá haya sido el comienzo de más proyectos juntos en el futuro.
