Hoy y mañana tenemos actividades culturales en la escuela. Hoy hemos quedado a las 9 de la mañana en la Estación de autobuses para realizar una ruta guiada por la isla de Seurasaari y Sibelius Park. La isla de Seurasaari es una pequeña isla museo a las afueras de Helsinki. Es un recorrido que se hace fácilmente y entre árboles. En ella podemos encontrar las construcciones típicas de Finlandia de muchas épocas, ya que se han dedicado a restaurarlas y trasladarlas a esta isla. Es un lugar precioso donde pasar una mañana tranquila.
Después nos hemos trasladado al Parque Sibelius, situado a orillas del mar, en el barrio de moda de Töölö. Es el espacio verde más famoso y un imprescindible que visitar en Helsinki.
Su lugar más destacado es la escultura del compositor y violinista finlandés más conocido, Jean
Sibelius, formada por 580 tubos de acero que, cuando sopla el viento, realiza un sonido musical.
Cerca del monumento se encuentra el Cafe Regatta, donde hacemos una parada técnica, una antigua cabaña de pescadores en el que recuperar el calor corporal comiendo unos típicos rollitos de canela aunque para los menos frioleros, siempre puedes tomar algo en la terraza con vistas al lago, que según la época se puede encontrar totalmente helado.
Me despido de mis compañeras pero con la mochila cargada de nuevos contactos y amistades. Anja, profesora alemana de Hannover, me ha propuesta enviar a mi inst a una profesora de su colegio para enseñar alemán e inglés durante un curso escolar. Y Magda, de Polonia, me ha propuesto llevar a cabo un proyecto E-Twinning juntas. Los cursos estructurados de Erasmus no solo sirven para aprender sino también para establecer nuevos lazos y contactos con profesores de otros centros educativos europeos. Me vuelvo tremendamente contenta y satisfecha.
Una vez terminada la ruta, he decidido coger un ferry a Tallin (Estonia) y no hacer la actividad cultural prevista por la escuela para el domingo en Helsinki, ya que he quedado por la tarde con un profesor alemán, con el que he trabajado en proyectos europeos con anterioridad y que da clases en Tallin, para que me enseñe su escuela y explicarme cómo funciona el sistema educativo estonio.
La escuela que he visitado es pública, se llama Tallinna Saksa Gümnaasium, es alemana y se sostiene con fondos del gobierno de Estonia. Es, por tanto, bilingüe en alemán, enseñan cinco materias en esta lengua: historia, física y química, ciencias, lengua alemana y geografía. Las clases duran 45’ y los profesores imparten 26 horas semanales de enseñanza directa. El instituto cuenta con aulas-materia, zonas de recreo y ocio para el alumnado, terraza, comedor escolar y parking de patinetes y bicicletas, además de contar con casilleros para los alumnos. En estos momentos tienen en la segunda planta (en el pasillo) una exposición de arte de un pintor alemán afincado en Estonia. Esta iniciativa, que me parece fantástica, podríamos llevarla a cabo en nuestro centro y así acercar el arte local o regional a nuestro alumnado del centro.
Como punto positivo destacaría que el gobierno estonio invierte mucho dinero en educación y ello puede apreciarse en las instalaciones que tienen (las luces de las aulas se encienden y apagan por sensor de movimiento, por ejemplo). Tienen de fondo como modelo a seguir el nórdico, de ahí que fomenten el trabajo colaborativo y grupal. En estos momentos están con enseñanza online en algunos cursos debido a los casos de COVID en ciertos niveles. Hoy no había alumnos al ser fin de semana. Es un centro con larga tradición participando en proyectos europeos y el profesor alemán me ha propuesto coordinar junto a mi escuela un proyecto sobre medioambiente, en el caso de que les concedan la acreditación lingüística (nosotros ya estamos oficialmente acreditados). Estos cursos son la llave para comenzar otros proyectos!;)
Lucía Delgado - Erasmus+ Team del Clara