Hoy es el penúltimo día de curso y vamos a visitar Westman
Islands. Como es sabido, Islandia tiene una enorme actividad volcánica y
Heimaey, su isla principal, es un ejemplo de resiliencia. A través de esta
isla, hemos profundizado en su historia volcánica visitando el Museo
Eldheimar, memorial dedicado a la erupción del volcán Eldfell que obligó a
evacuar a la población de Heimaey. El museo muestra cómo afectó a la isla y
cómo la comunidad se recuperó. Como curiosidad, las casas tienen una fecha
grabada en sus fachadas para conmemorar este hecho del 23 de enero de 1973,
cuando la erupción volcánica, que comenzó en la montaña Eldfell, enterró parte
de la ciudad bajo lava y ceniza. Esta fecha sirve como un recordatorio
constante del impacto del desastre natural y la resiliencia de la comunidad que
logró reconstruir la ciudad.
También profundizamos en la vida marina y la cultura
local. Heimaey es un lugar excelente para observar frailecillos, ya que en
esta isla se concentra la colonia más importante de Islandia. Se pueden ver
solo en la temporada de cría que abarca de abril hasta finales de agosto. Es
la mejor época para verlos en grandes cantidades, ya que están más activos
anidando, alimentando a sus crías y volando de un lado a otro.
Como reflexión final tras esta visita, me llama la atención
que no hay apartamentos ni hoteles construidos alrededor de las zonas de playa,
por lo que la fauna y flora conserva por completo su hábitat.
Tras finalizar la visita, realizamos la ceremonia de entrega
de los certificados. Es un lugar fantástico para llevarla a cabo, puesto que el
paisaje es inmejorable.