Cada día en el curso Erasmus nos ponen tareas que debemos
llevar a cabo durante la jornada, se trata de aplicaciones prácticas para
nuestras clases de lo que vamos aprendiendo. Estas actividades nos hacen ver
cómo podemos llevar de una forma sencilla las metodologías y contenidos trabajados
al día a día. Hemos tenido que analizar el paisaje desde un punto de vista
creativo, buscando formas y explicando al resto en qué nos basábamos, esto para
nuestro alumnado puede ser una aproximación al entorno creativo y educativo a
la vez que se trabaja la competencia lingüística y la mediación. Otras
actividades han estado relacionadas con búsquedas del tesoro, con
geolocalización, puesta en común de conocimiento sobre entornos, evaluación,
etc.
Por supuesto, durante esta semana, la mediación lingüística,
la expresión oral en lengua inglesa y la interculturalidad ha estado presente
en cada actividad y visita que nos han propuesto, haciendo una aproximación a
la cultura islandesa a través de los exteriores y con las excelentes
narraciones de nuestra guía islandesa Erla, que nos ha ofrecido desde la
historia oficial hasta los entresijos del día a día y anécdotas de los
habitantes de Islandia. Ha sido muy enriquecedor escuchar de la boca de una
local de dónde nace el respeto por la naturaleza y el punto de vista de las
personas que nacen y viven en los lugares protegidos y que, a menudo, son las
grandes olvidadas cuando se trazan planes de protección del medio natural. Por
otro lado, a interacción con profesores de muchos países de Europa ha sido
enriquecedor, pudiendo escuchar y comparar nuestros sistemas educativos,
organización de centros y estilos de vida.
Nuestra última salida de hoy ha sido en la península de Snaefellsnes,
donde visitamos el Parque Nacional de Snaefellsjökull, con su glaciar con
volcán dentro, que Julio Verne incluyó como punto de partida en su Viaje al
centro de la Tierra. Pasamos por Olafsvik, vimos la famosa, gracias a las
redes sociales, iglesia negra de Budir, estuvimos en Londrangar y visitamos uno
de los escenarios de series como Juego de tronos, una montaña que más
bien parece una pirámide.
Durante una visita a un centro de interpretación del Parque,
vemos un trabajo hecho por estudiantes, se trata de plasmar en una tela
continuada una saga tradicional, mediante el uso de materiales reutilizados,
cosidos y dibujados, construyendo la historia, a modo de cómic. Es un ejemplo
de cómo la moda sostenible se puede integrar en una clase de lengua, literatura,
historia y arte, y de cómo la cultura local puede servir para trabajar la
expresión escrita, en este caso, en islandés, la lengua de las sagas y la
cultura local.
Isabel Pasarón.